Las Cuatro Estaciones de Vivaldi en Padua

Las Cuatro Estaciones de Vivaldi en Padua

La música que representa los estados de ánimo de las cuatro estaciones siempre ha sido popular. Compositores barrocos como Werner y Fischer compusieron ciclos de conciertos que representaban las estaciones. ¡Pero ninguno de ellos lo hizo con una representación tan precisa e imaginativa como Antonio Vivaldi en su concierto “Las Cuatro Estaciones“!

Toda la época del Barroco mostró un profundo interés por los asombrosos cambios naturales que vienen determinados por las estaciones del año. El mismo Bernini las representó en sus delicadas esculturas. El arte barroco tenía una visión dramática de la relación entre el ser humano y la naturaleza, así como entre el ser humano y el universo. Los descubrimientos de Galileo provocaron un desplazamiento en la posición del hombre, quien dejó de estar en el centro del cosmos. Como resultado, surgió una nueva actitud de asombro y respeto ante el poder de la naturaleza.

Las “Cuatro Estaciones” de Vivaldi son un símbolo de su época. No solo transmite ese sentimiento de asombro mediante su espectacular descripción de la naturaleza, sino también a través de su lenguaje musical. La composición pretende maravillar al oyente con melodías inusuales, creadas mediante un ritmo intensificado y contrastes armónicos más marcados. Su música es así más libre, fluida y mejor capaz de contar la historia que quiere representar. Las escenas van desde el canto de diversos pájaros en la primavera, las tormentas veraniegas, los zorros huyendo en otoño, hasta el castañeteo de dientes y la lluvia torrencial en invierno. En consonancia con la máxima expresión de los conceptos barrocos, la naturaleza se dramatiza y el público se siente activamente involucrado en la rápida sucesión de acontecimientos de la obra.

ARTISTAS:

Solista de violín y director: Elvin Dhimitri
Quinteto de cuerdas
Clavecín

Elvin Dhimitri ha sido reconocido como un artista que combina una energía apasionada con una expresividad vibrante. En 1992 fue nombrado concertino de la Orquesta Sinfónica Internacional Juvenil de Bilkent. Ha tocado en la Orquesta Sinfónica del Luglio Musicale de Trapani, la Orquesta Sinfónica La Nuova Scarlatti de Nápoles y la Orquesta Sinfónica Toscanini de Parma, por nombrar solo algunas. Fue nombrado primer violín de la Orquesta Filarmónica de Roma y, desde 1997, es miembro de la Orquesta Sinfónica de Roma y Lacio.

programa

First Time

Concerto F XI No.4 in A Major
Allegro molto/Andante molto/Allegro
Concerto “La Rustica” RV 151 in G Major
Presto/Adagio/Allegro
Concerto RV 127 in D Minor
Allegro/Adagio/Allegro

Second Time

Concerto No.1 in E Major, RV 269, “SPRING”
Allegro/Largo/Allegro (Pastorale dance)

Concerto No.2 in G Minor, RV 315, “SUMMER”
Allegro non molto - Allegro/Adagio-Presto-Adagio/
Presto (Summer Storm)

Concerto No.3 in F Major, RV 293, “AUTUMN”
Allegro (Peasant Dance and Song)/Adagio molto
(Sleeping Drunkards)/Allegro (The Hunt)

Concerto No.4 in F Minor, RV 297, “WINTER”
Allegro non molto/Largo/Allegro

Lugar

La Sala de los Gigantes del Palazzo Liviano en Padua, Italia, es una sala impresionante, famosa por sus frescos monumentales que representan la caída mitológica de los gigantes derrotados por Zeus. La pintura cubre de manera continua las paredes y el techo en una composición dramática y dinámica. Inspirada en Giulio Romano, la sala es una obra maestra del arte manierista y hoy en día también se utiliza para eventos culturales, brindando un entorno artístico e histórico único.